miércoles, 20 de noviembre de 2013

Polémico

Digan todo lo quieran, pero el tipo cumplió con creces su trabajo.
Hizo lo que tenía que hacer, y le puso el pecho a todo lo que le tiraron.
¿Me vas a decir que no quisieras un tipo así en tu gobierno, o que no hace falta un tipo así en cualquier gobierno?





¿Decime, que opinas ahora de esta imagen?




¿A quién ibas a mandar a la Asamblea de accionista de Clarín?¿A Lorenzino?


Que se yo, nada, solo eso, ¿políticamente incorrecto? , y sí, ¿y qué?

viernes, 25 de octubre de 2013

Preocupación por el delito

En este retomar mi blog quiero dejarles una nota muy interesante sobre los tiempos que vivimos y su percepción.

GABRIEL KESSLER EN LA UNL
 “Nada bueno ocurre cuando la preocupación por el delito es central”

 El sociólogo brindó una conferencia en la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales.
Su análisis invita a reflexionar más allá de lugares comunes y simplificaciones sobre la temática del delito urbano, partiendo de los aportes que las Ciencias Sociales produjeron en los últimos 15 años.

 Juventud, delito y desigualdad

... Kessler señaló que entre mediados de la década de 1980 y la de 1990, la edad promedio de la población penada disminuyó unos 10 años (de 32, 33 años; pasó a 22, 23), lo que no puede ser interpretado linealmente como una baja en la edad de quienes cometen delitos, porque sigue pendiente la pregunta de si no hay un direccionamiento de la acción policial y judicial hacia esa franja etaria.
Ese proceso de “juvenilización de la población carcelaria es una de las deudas sociales más fuertes que tenemos”, aseguró. Y argumentó contra la idea de una “carrera delictiva”, que ve en el delito juvenil un elemento predictor de continuidad en la vida adulta.

Además, reflexionó sobre la existencia de grupos de pares, que sin llegar a formar grandes bandas, pandillas o “maras” como en América Central, se formaron a fines de los 90 “entre jóvenes en una misma situación de necesidad, en un mismo territorio, que habían crecido como niños en hogares con algún tipo de recursos, y entraron a su adolescencia cuando se desestabilizaba el mercado de trabajo, y quedaron pobres o en una situación desfavorecida en la distribución de recursos al interior del hogar”.

De manera retrospectiva, Kessler señaló que en esos contextos lo que percibía en sus estudios de campo durante la década neoliberal como una “instrumentalidad extrema” de ciertos delitos menores, llevados a cabo para satisfacer necesidades puntuales en un corto plazo, era en realidad “una de las formas en las que la desigualdad social se expresaba como una disminución de las posibilidades de hacer otra cosa”.

Después del año 2003, el sociólogo refirió a una situación paradójica por la que si bien existen mayores oportunidades de trabajo “hay bolsones de miseria donde las tasas de desigualdad y desempleo siguen siendo muy altas. En ese sentido el impacto de la estigmatización territorial, que no es nuevo pero que con la preocupación por la seguridad se vuelve más fuerte, hace que muchas oportunidades de trabajo estén vedadas a esos jóvenes”. Al interior de esos barrios, la mayor presencia y presión policial deriva en ocasiones en “microviolencias cotidianas, que aún no entran en la agenda de Derechos Humanos, y que forman parte de una conflictividad entre los jóvenes y la policía”. Asimismo, refirió a estudios de campo en el conurbano bonaerense que dan cuenta de una familiaridad y presencia cotidiana de la posibilidad de muerte entre los jóvenes que habitan esos territorios.

La nota completa en: http://www.unl.edu.ar/noticias

lunes, 29 de julio de 2013

Campaña "Mas x Menos" versión socialista

Bueno, no estamos hablando de la campaña de Caritas sino de la emprendida por el Gobierno Socialista de Santa Fe.

Y como siempre es mejor ir a las fuentes, pues aquí las fuentes:


Decreto 1020/2013 gestión (0) (viernes 3 de mayo de 2013)
MODIFICA EL PRESUPUESTO VIGENTE DEL MINISTERIO DE GOBIERNO Y REFORMA DEL ESTADO DESTINADO A LA ATENCION DE GASTOS DE PUBLICIDAD Y PROPAGANDA
FIRMANTES: BONFATTI – GALASSI – SCIARA

DECRETO Nº 1020
SANTA FE, “Cuna de la Constitución Nacional”, 03 MAY 2013

V I S T O:

El Expediente Nº 00101-0235313-7 del registro del Sistema de Información de Expedientes; y,

CONSIDERANDO:

Que por su intermedio se propicia una modificación del Presupuesto General de la Provincia por la suma total de PESOS VEINTICINCO MILLONES ($ 25.000.000,00.-) a efectos de incrementar la partida de “Publicidad y Propaganda” existente en esta Jurisdicción 11: MINISTERIO DE GOBIERNO Y REFORMA DEL ESTADO;

Que corresponde mencionar al respecto que la necesidad de refuerzo de la partida se fundamenta en la permanente difusión de las actividades desarrolladas en el marco de la gestión de gobierno, como así también en el cumplimiento de los requisitos legales atinentes a la publicación de licitaciones públicas, privadas, concursos de precios y similares que la normativa exige, a lo que se agrega el fuerte impacto de los incrementos de tarifas de una gran cantidad de medios que a la fecha se han debido autorizar para poder utilizarlos como vías de difusión;

Que atento a ello resulta necesario propiciar una modificación compensada del Presupuesto General de la Provincia entre la Jurisdicción 91: Obligaciones a cargo del Tesoro y la Jurisdicción 11: Ministerio de Gobierno y Reforma del Estado por la suma total de PESOS VEINTICINCO MILLONES ($ 25.000.000,00.-);

Que la resolución del trámite se ajusta a las disposiciones contenidas en el Artículo 28º inciso g) de la Ley N° 12.510 de Administración, Eficiencia y Control del Estado y a las disposiciones del Artículo 57º de la Ley Nº 13.338 de Presupuesto 2013, por el cual la Provincia adhirió a las disposiciones de la Ley Nacional Nº 26.530, prorrogada para el año 2013 por el Artículo 49º de la Ley Nº 26.784 de Presupuesto Nacional 2013;

POR ELLO:

EL GOBERNADOR DE LA PROVINCIA DE SANTA FE
D E C R E T A

ARTICULO 1º: Modifícase el Presupuesto vigente en la Jurisdicción 91: OBLIGACIONES A CARGO DEL TESORO –REDUCCIÓN - por la suma de PESOS VEINTICINCO MILLONES ($ 25.000.000,00.-) en un todo de conformidad con el detalle obrante en la Planilla Anexa “A” que forma parte integrante de la presente norma legal.

ARTICULO 2º: Modifícase el Presupuesto vigente en la Jurisdicción 11: MINISTERIO DE GOBIERNO Y REFORMA DEL ESTADO –AMPLIACION- por la suma de PESOS VEINTICINCO MILLONES ($ 25.000.000,00.-) en un todo de conformidad con el detalle obrante en la Planilla Anexa “B” que forma parte integrante del presente decisorio.

ARTICULO 3º: Refréndese por los Sres. Ministros de las carteras de Gobierno y Reforma del Estado y de Economía.

ARTICULO 4º: Regístrese, comuníquese y archívese.


Y aquí la Planilla Anexa A:



EN SU PAIS NORMAL QUITARLE PRESUPUESTO A EDUCACIÓN Y DESTINARLO A PROPAGANDA ESTÁ BIEN.
Destinar más del 6% PIB, o crear nuevas Universidades eso es Anormal y repudiable.

Fuente: http://gobierno.santafe.gov.ar/sin/mitemplate.php?tiponorma=decreto&anio_norma=2013&fecha_norma=03%2F05%2F2013&gestion_dec=0&nro_dec=1020

lunes, 8 de julio de 2013

Periodismo Podrido Para Todos

Bueno, una vez más el vendedor de pescado podrido Lanata vendió su mercancia super-hiper-archi-fucking-re-chequeada.








Y una vez más Luis D'Elia le tendió la cama tamaño king, osea del tamaño del ego del Periodista/vedette devenido en empresario del reciclado del pescado.

TN, en su sitio web publico lo que sería la NOTICIA de la SEMANA:




Pero al toque Luis publicó esto:







Entonces, y dándose cuenta que el Gordo, otra vez, había olvidado eso de super-hiper-archi-fucking-re-chequear la info, o mejor dicho, visto que la mentira tuvo patas muuuuy cortitas, tuvieron que recular y entonces sucedió esto:






Por suerte hay gente que se las sabe todas:
Aquí el enlace de la NOTICIADELASEMANAQUENOFUE:
http://webcache.googleusercontent.com/search?q=cache:http://tn.com.ar/politica/piqueteropetrolero-los-detalles-de-la-empresa-de-luis-d%C2%B4elia_398498



viernes, 21 de junio de 2013

Sinceridad: Asustar y nada más

Al fin nos ahorraremos leer párrafos de complicadas teorías con las cuales nos querían convencer de que está todo mal y que estaremos peor, mucho peor, si no hacemos lo que ellos quieren que hagamos.

Sí señores, ya no importa justificar los TITULOS APOCALIPTICOS, con extensas notas y entrevistas a
los gurues y pitonisas que tiene VERDAD en todo lo que dicen.

Fuente esta


domingo, 16 de junio de 2013

Un EDITOR al pie por favor, gracias

Primero y muy importante: me importa un carajo Baez, que lo metan preso y tiren la llave si es culpable.

Bien, ahora esto es genial:

"Por demoras y trabas, la investigación contra Báez no despega
En la Justicia admiten que aún no se reunieron elementos clave; sostienen que es difícil probar el delito de lavado"

Bue, no eso exactamente, sino la nota al pie del EDITOR, que se supone que no es el AUTOR de la nota:

"Del editor: qué significa.
Es cierto que el lavado es un delito técnicamente difícil de probar, pero también es cierto que la investigación tuvo todos los ingredientes para que no prospere."



Jajaja, que HIJOS DE REMILPUTAS, jajaja
Como la nota deja entrever que al amigo del gobierno no pudieron probarle nada, porque se trata de una burda opereta mediática, el editor tuvo la necesidad de aclarar, u oscurecer, para poder continuar...

Sería algo así como los finales de películas de terror, donde emerge desde una tumba una mano en señal de que se viene la segunda, y tercera y cuarta y... enésima parte.
Y así de pésima y burda es esta noticia bomba que se tiró el gordito.


lunes, 27 de mayo de 2013

Carta Abierta Nº 13: "Los justos"

Comenzamos esta carta –que a la vez es un llamado– con la fácil comprobación de cómo han avanzado, de qué recursos se valen y cómo se realizan los crecientes procesos de deslegitimación del Gobierno. El estadio siempre presente de lo político, si bien no suele ser el más hablado, es el de la creencia colectiva, la libre opinión emancipada del tejido social. Hay un tono diario que tienen el hombre y la mujer de la calle para expresar en un sistema sabido de signos rápidos, sus opiniones sobre la relación de los hechos colectivos con sus propias perspectivas vitales. Como sabemos, son la forma más profunda y también menos formalizada de las opciones políticas. Creencias en estado de insinuación, que suelen llamarse humores o estados de ánimo, nombres imprecisos pero elocuentes, en cuyo otro polo suelen estar las elucubraciones más exigentes, el cálculo de los políticos y el modo real en que operan las fuerzas sociales y económicas.


Estamos hablando del basamento efectivo y crítico en que se enraíza todo gobierno, el sustento de la verosimilitud del vivir común en un sociedad, las hipótesis que nos dejan entrever que no hay miedo en la convivencia, que hay esperanza en la vida pública y argumentos, por más que puedan ser apenas borroneados, en la esfera manifiesta de las acciones democráticas. Revistiendo tanta importancia el núcleo de creencias públicas que son siempre cambiantes, pero no impiden revelar una viga maestra de donde toda comunidad viviente extrae el concepto de lo justo, hasta cierto punto es lógico que sean ellas las primeras atacadas. Ellas deben ahora encontrar sus propias lógicas expresivas ante el avance impiadoso de una narrativa mediática que apunta a deslegitimar, bajo la forma de un relato brutal, lo recorrido desde mayo de 2003. Para producir el ataque buscan sus símbolos evidentes, las palabras que ciertos ritos, ingenuos o profundos, señalan como el lugar de la creación de mancomuniones sociales. Es lógico, decimos, que quien desee perjudicar de modo extremo esta conjunción ciudadana donde se encuentran las instituciones visibles y la vida cotidiana, las políticas públicas y las realidades del trabajo, la actividad persistente de las más diversas militancias, dirija su hostilidad a los cimientos formadores de la adhesión que se congrega en las capas de la población que sostienen una experiencia singular de cambios sociales. ¿Qué cambios? Los que implican que por primera vez en la historia nacional se discutan aspectos de la organización del Estado y la sociedad, de la Justicia y los medios de comunicación, con sentido emancipador y no restrictivo o portador de coerciones. Se trata, después de muchos años, de darle a la idea de justicia una dimensión que logre articular lo que siempre fue prolijamente separado por los poderes económicos: la libertad y la igualdad. Contra la apertura inédita de estas dimensiones fundamentales de la vida social es que se dirigen estas acciones profunda y visceralmente desestabilizadoras no sólo de la continuidad de un proyecto transformador sino, también, destinado a incidir insidiosamente sobre el sentido común de una parte significativa de la sociedad que es capturada por ese discurso destructivo y hostil de cualquier forma de convivencia democrática. De las cloacas del lenguaje se extraen los argumentos que, más allá de cualquier prueba, son presentados como la verdadera cara de un gobierno supuestamente atrapado en su propia red de venalidades y corrupciones. Ya no importan las diferencias políticas o ideológicas, tampoco los modelos económicos antagónicos, lo único que le interesa a esta máquina mediática descalificadora es sostener un bombardeo impiadoso y constante que no deje nada en pie.

Pero entonces, con menos pruebas que arietes dirigidos a mansalva, ausentes los fundamentos del uso de la prueba, la investigación, el juicio sobre las leyes y el mismo andamiaje legal del país, se considera todo ello fruto de un espíritu despótico, de jefes políticos que se prepararon toda una vida para llegar a la función pública mandando agrandar los cofres familiares mientras pronunciaban palabras como impuesto a la renta agraria o asignación universal por hijo. Nuevamente la impostura pero ahora justificada por un ansia desenfrenada de enriquecimiento. La oscura figura del avaro, la brutal construcción del “judío” con los bolsillos llenos de dinero que supo desplegar el antisemitismo exterminador, el relato de fabulosas bóvedas rebosantes de oro y de billetes se convierten, como en otros momentos de nuestra historia en la que gobiernos populares fueron derrocados por ominosas dictaduras, mediante la estética del más consumado amarillismo periodístico, en santo y seña de una oposición que busca destruir no sólo un gobierno, sino la propia legitimidad de la política. Todos los recursos de esas estéticas televisivas y de la ficcionalización disfrazada de realidad son movilizados por quienes buscan horadar a un gobierno que, por primera vez en décadas, cuestionó injusticias y desigualdades, tramas monopólicas y abusos de poder de quienes siempre se sintieron los dueños del país. Quieren sembrar la duda en el interior de la sociedad. Buscan emponzoñar una realidad que ha sido transformada en un escenario por el que desfilan políticos corruptos, valijas llenas de dinero, oscuros entuertos financieros, prebendas nacidas del afán pantagruélico de quedarse con riquezas fabulosas. Atacan no sólo al kirchnerismo. Su objetivo es más amplio: apuntan a destituir cualquier posibilidad de que la política sea un instrumento emancipador.

Pero si se discute la Justicia es porque finalmente una comunidad arribó a la discusión de lo más profundo que hay en la Justicia: lo que se halla en las pausas internas de sus articulados, en la manifestación misma de las figuras del derecho, que es lo que aquí llamamos lo justo. El intrínseco actuar común en torno del diferendo que se resuelve con argumentos y el pensar sobre los otros. Lo justo es la alteridad de nuestra propia vida ofrecida como prueba de que ella misma debe introducirse en esos domicilios del pensar común sin hacer excepciones a favor de uno mismo. Lo justo también como una práctica que, al mismo tiempo que reconoce al otro y a su diversidad, también se afirma en la distribución más igualitaria de los bienes materiales y simbólicos. Lo justo no como retórica de lo nunca realizado sino como evidencia, más que significativa a lo largo de esta última década, de un proceso de transformación social que no sólo vino a reconstruir derechos sociales y civiles sino a poner en cuestión la hegemonía de aquellos que condujeron al país a la desigualdad y la injusticia. Eso es lo que no perdonan ni aceptan. Contra eso dirigen todas sus baterías mediáticas y sus golpes de mercado.

Sin embargo, los ataques a lo justo comienzan siempre en los lugares más sensibles, que son donde se equilibran el deber de los funcionarios con la organización de un formidable sistema para repartir cuotas perseverantes de sospechas o suspicacias respecto de su probidad y acciones regidas por lo que convenimos en llamar ética pública. Esto ocurrió en todas las épocas, porque no es de hoy el descubrimiento de que la ética pública es menos un decálogo de virtudes que un sistema de símbolos de enorme fragilidad que tiene su domicilio último en el empleo consistente y verídico de la palabra pública. No sabríamos decir, ahora, si las enormes maquinarias para horadar a los cuadros dirigentes de un país han excedido, por un lado, lo que ocurría en épocas pasadas, cuando eran las grandes crisis económicas, los procesos interminables de inflación –como en la Alemania de los años ’20–, los ámbitos de incerteza que hacían que todo lo sólido se evaporase en el aire. Sí sabemos que están dispuestos a empeñarse a fondo, sin ahorrar ningún recurso, para descalificar a un gobierno que ha puesto el dedo sobre la llaga del poder hegemónico en el país; de un gobierno dispuesto a doblar la apuesta abriendo brechas antes inimaginables en el interior de una sociedad que parecía entregada al saqueo de todas sus esperanzas.

Una época de cambios en una perspectiva democrática y popular implica un orden de credibilidades públicas donde no sea la prepolítica del miedo la que dirija la economía sino la economía la que se inserte como acto inherente a las figuras explícitas del argumento político. Los pronósticos de las crisis capitalistas como los que realizara Rosa Luxemburgo en 1913 o las graves desidias comprobables que se notaban en la esfera pública en las épocas que llevaron a terribles guerras siguen siendo aleccionadoras. A estos eventos, que denominaríamos crisis objetivas de los sustentos de los regímenes representativos parlamentarios, se les agrega ahora el proyecto de originar un descalabro en las figuras públicas que son emblemas de gobiernos populares y le dan su forma de aglutinamiento, especialmente fijadas en su nombre. Lo que antes era la consecuencia de la debilidad de regímenes parlamentarios que fueron sistemáticamente carcomidos por la ampliación de la crisis económica y el avance de las derechas fascistas hoy ha mutado en una prédica seudomoralista que busca deslegitimar a gobiernos democrático-populares utilizando los recursos, antiguos, de la denuncia serial y el fantasma de la corrupción. No ha habido en el pasado ni en la actualidad un solo gobierno popular que no haya recibido las descargas de esa seudomoralina autoproclamada como el último bastión de la verdadera república siempre amenazada por los populismos. Una simple y rápida revisión del papel de ciertos medios de comunicación en nuestra historia, al menos desde Yrigoyen en adelante, permitiría poner en evidencia la falta de originalidad de la actual campaña desestabilizadora que se viene llevando a cabo en nombre del “periodismo independiente”. Otro tanto comprobaríamos con sólo echar un vistazo a lo que ocurre en otros países de la región en los que los intereses de la derecha se complementan perfectamente con el funcionamiento de los grandes medios de comunicación. Nunca ha sido tan clara la intervención desestabilizadora de la máquina mediática puesta al servicio del establishment económico-financiero. Un lenguaje surgido de las letrinas amarillistas y de las gramáticas del golpismo histórico se despliega con virulencia insidiosa desde las usinas del poder mediático que han dejado de apelar a cualquier tipo de argumentación para desencadenar, una tras otra, una batería de rumores, mitos urbanos de enriquecimientos olímpicos, denuncias indemostrables articuladas con una colección de personajes que van de los lúmpenes del jet set vernáculo a una ex secretaria despechada.

Se funda entonces una maquinaria de horadar, que por supuesto no es nueva y que incluye muchos antecedentes en el pasado inmediato de la cultura social de Occidente, y especialmente de nuestro país. Indirectamente aludimos a la caída de la República de Weimar que dejó abierto el camino para el ascenso del nazismo al poder, pero también a los climas previos fomentados por agencias operativas de los intereses derrocadores, en el caso del gobierno de Arbenz –en Guatemala– y del candidato Gaitán –asesinado en Colombia en plena campaña electoral–, desde luego, siempre con climas en la prensa donde se hace cabalgar con mayor o menor grado de ingenio a los jinetes del Apocalipsis, pero con actos donde de repente se abren los enrejados de infinitas acusaciones de los ámbitos conservadores, de cuyas tinieblas puede emerger el revólver donde habita, como dueño del argumento seco, el disparo final. En nombre del saneamiento moral de la república se abrieron las compuertas para los peores regímenes dictatoriales. En nuestra realidad sudamericana, en ese mismo nombre se busca terminar con los proyectos de matriz popular y democrática que comenzaron al final de la década del ’90 con Hugo Chávez en Venezuela y que se continuaron en Brasil, Argentina, Uruguay, Bolivia y Ecuador, signando un tiempo extraordinario en la historia de un continente dominado y sumergido en la pobreza y la desigualdad por aquellos que siempre hablaron en nombre de la moral pública. En su nombre avanzó el golpismo en Honduras y Paraguay.

Estamos en tiempos diferentes, pero en los cuales una sutil forma de golpismo opera todos los días bajo el amparo de los nuevos estilos de escenificación, agrietamiento y cancelación de las creencias sociales. Ejemplos de esta actitud no son difíciles de encontrar en la historia de nuestro país. La campaña del diario Crítica en los años ’20 es un ejemplo característico y debe estudiarse en todas las escuelas de comunicación social. Más allá de la figura, curiosa e interesante en su excentricidad, de Natalio Botana, el diario salía con sus martillos cotidianos a perforar creencias cívicas con ejemplos resonantes de corrupción, ineficiencia, extravagancia del gobernante (la senectud de Yrigoyen) y la asimilación de sus partidarios al Ku Klux Klan. Hombres sinceros de izquierdas y derechas –que precisamente se congregaban también en la redacción de Crítica– adoptaban estas manifestaciones de ingenio metafórico del diario más popular, a fin de no sentirse expropiados en su conciencia si caía al fin y al cabo un gobernante llamado inepto –llorado pocos años después, en ocasión de su fallecimiento, por millones de argentinos, muchos de ellos embargados en un tardío y comprensible arrepentimiento–. Por cierto, estas corrientes subterráneas cuyo índice sísmico es la inmediatez del cuadro económico (la Argentina ha salido de crisis profundas, pero atraviesa conocidos problemas: para el primer caso no conceden reconocimientos, para el segundo ausentan toda clase de comprensión), operan como corrientes que siempre han actuado como terreno ya roturado para las aventuras contrainstitucionales, aunque pasan muchos períodos dormidos a la espera de sus irrupciones cíclicas en la historia nacional. Hoy regresan tratando de cerrar un tiempo argentino caracterizado por el avance poderoso de políticas de reparación social. Van en busca de la reconstrucción de sus privilegios y, para ello, no dudan en movilizar tanto los recursos de la espectacularidad televisiva como la complicidad de una oposición carente de ideas propias. La sombra del revanchismo social, esa que conocimos en 1976 y que acabó instalándose con el menemismo, se yergue como una amenaza contra todas las corrientes populares y progresistas y no sólo contra el Gobierno. ¿Comprenderán los genuinos demócratas que de triunfar la alquimia de vodevil mediático, intereses corporativos, gestualidad antipolítica y neogolpismo especulativo, lo que nos espera será nuevamente el vaciamiento de la vida institucional democrática y el retroceso social? ¿Entenderán que lo que está en juego es la propia idea de la política como instrumento emancipador? El aliento fétido de la regresión neoliberal sale de la pantalla impúdica los domingos a la noche.

No actúan con pruebas ni documentos irrefutables. Están antes de la prueba y el documento, en esa faja indocumentada (no que no los tengan en sus identidades propietarias, puesto que son los que más los poseen) respecto de qué es, qué fue, qué termina siendo un ciclo histórico en la Argentina. No actúan en nombre de lo justo, sino de una peripecia espiritualmente de las más complejas, llamando justicia al desequilibrio social que actúa a su favor, y llamando golpismo a lo que haría el Gobierno, a fin de justificar lo que con vergüenza en el decurso de los tiempos muchas veces terminaron acompañando, esto es, sus propios llamados golpistas sin precisar pronunciar ese mismo nombre. Lo hacen con la facilidad llamativa de haberse convertido en pobres comediantes de las derivas fatales de militares golpistas y ministros de Economía que revestían de argumentos nacionales un fatídico arte para la depredación de los recursos financieros, energéticos y económicos de la nación. Son actores de un relato que afirma la condición autoritaria y hasta dictatorial del Gobierno para generar las condiciones de una irrevocable restauración conservadora. Son quienes sin sonrojarse hablan desde sus editoriales de “terrorismo simbólico de Estado” utilizando la tribuna que se benefició del terrorismo real que durante la terrible dictadura de Videla le dio forma a la apropiación de una empresa que acabó en las manos de quienes construyeron el monopolio del papel para diarios en Argentina. El cinismo y la mentira como instrumentos de esa moral republicana que dicen defender.

Estas porciones no siempre pequeñas de la población han aguardado en sus reductos sentimentales, con su arte de mascullar formas de opinión que hacen al juego normal de la democracia, pero son multitudes disconformes de su propio lenguaje democrático, que no dudamos que lo tienen, pero como posesión particularista, sin animarse a definir lo democrático como lo justo y lo justo como la contingencia donde hay que decidir a favor del bien público siempre. Por eso tiene también el exceso respecto de ese lenguaje, una sobra inabsorbida por sus corazones que, por motivos no siempre incomprensibles, dudan sistemáticamente y a priori de las medidas sociales progresistas y reaccionan cuando perciben tropiezos, que es evidente que los son, que son sometidos a un sistema de magnificaciones e hipérboles donde todo es escandaloso y falso. Nada más impropio que a un país lo dirijan falsarios enmascarados. ¿Se precisaba el magno folletín que contara esta historia fantasmal con castillos draculianos y llamados telefónicos a carpinteros infernales que construyeran bóvedas, criptas o cúpulas salidas de un relato de Edgar Allan Poe, que los carpinteros de la utilería televisiva tratan de remedar entre risotadas?

El impulso dramático que tienen estos métodos, que proviene del uso central de los medios de comunicación más entrelazados con una receptividad indignada (por razones ni siempre justas ni siempre injustas), pero que opta por una escena de truculencias que remiten a la clásica acusación del golpista que ve el origen de su insondable rencor en el supuesto golpismo de los otros. No admite ser un agente explícito de la libertad de expresión mientras dice que no la hay. Y así llega a instalar, como si sobre una entera ciudad se colocara una red de semáforos perfectamente coordinados, unas fuertes denuncias a la corrupción a través de técnicas folletinescas viejas y modernas. La espectacularización de las noticias en general exime de pruebas pero no de un monologuismo sostenido por escenas cómicas e imitaciones con propósito degradante, bien diferentes a la genuina crítica que los artistas del humor e ironía les han dedicado a los gobernantes, desde los tiempos del periódico El Mosquito, que actuó hace ya un siglo y medio en la política nacional.

¿Vivimos en sociedades sin corrupción? Esto no es posible afirmarlo. Pero es posible decir que la corrupción más importante –si este concepto ganara en tipificaciones jurídicas antes que en amorfas descripciones de comedia musical– es la que ocurre en las grandes transacciones capitalistas en materia de estructuras financieras ilegales, circulaciones clandestinas, excedentes que pertenecen a rubros invisibles de la acumulación de sobreprecios, instancias implícitas de gerenciamiento de dineros privados considerados como mercancía de las mercancías en pequeños países que no es que tengan sistema capitalista, sino que el sistema capitalista los tiene a ellos. Cuando la política se convierte en un engranaje subordinado que implica un eslabón implícito de remuneraciones de la circulación financiera, estamos en una sociedad que posee sólo formas democráticas ficticias. Esa es la aspiración de quienes están por detrás de ese denuncismo desenfrenado, ésa es la escritura que elabora los guiones del neogolpismo folletinesco. Su aspiración no es lo justo, su estrategia busca erosionar a quienes lograron cortar la hegemonía indisimulada de aquellos que convirtieron, durante décadas, al país en una agencia del capital financiero.

Se llaman noveleramente paraísos fiscales, con un eufemismo sorprendente, a formas nacionales o territorios sostenidos por una suerte de ilegalizada legalidad en el alto capitalismo. Nuestro país es soberano, y sus problemas económicos y sociales, que no son pocos ni desconocemos, del mismo modo que señalamos los logros de esta década, sus ámbitos de discusión, que deberían ser más amplios y sus falencias en el debate público son evidentes –sólo pensar en el nombre de la etnia qom basta para ejemplificar muchos otros casos– no puede limitarse a enlatados de televisión con novelas seriales de grosera comicidad, donde se filman casas de funcionarios –aunque es cierto que hay que ser austero– y misteriosas cajas fuertes –es cierto que salidas de la imaginación de alguien que vio las formas físicas en que se representan el poder en películas como Batman o James Bond–. Sólo en novelas de Ian Fleming las cajas fuertes, los documentos públicos, las bolsas de dinero están en las cajas fuertes del poder, pues ésa es la representación empírica y prejuiciosa de lo que es abstracto y no mediato. Del poder sabe bien Goldman Sachs o los grandes financistas que pueden desencadenar guerras sin tener siquiera un bóveda debajo de la escalera de su casa.

Pero sabemos que este conjunto de palabras apunta a erosionar la figura pública de un ex presidente, en una acción que se torna una respuesta de music hall para problemas que merecen otro tratamiento. La marejada política del país llevó a la ley de medios, ésta a la necesaria reforma judicial, ésta a la consideración de la vida cotidiana bajo la normativa de lo justo, ésta a la nacionalización de numerosas empresas públicas, y todo esto debe llevar a nuevos estilos de discusión, donde en vez de verse los Dragones del Apocalipsis escondidos tras cortinados donde defienden con arbitrios y trompetas bíblicas sus cajas empotradas, hay que ver un gobierno que atraviesa distintos momentos y distintas dificultades, todos propios de la vida pública compleja, mundial y nacional, y cuyas explicaciones son más que obvias, por más que muchas medidas no se perciban totalmente eficientes. Pero lo cierto es que, una vez más, no lo atacan por lo que hizo mal sino por todo aquello, ya consignado, que ha significado un cambio notable y positivo en la vida del país. Lo atacan, y esto más allá de los errores y de los aciertos en esta larga batalla política, porque saben que la continuidad de este gobierno amenaza, como nunca antes, sus privilegios. Lo atacan, hasta la náusea y utilizando todos los recursos a su alcance, por haber reinstalado, en nuestra sociedad, la idea de que lo justo no constituye una quimera inalcanzable o una reflexión académica, sino la práctica posible de un proyecto sostenido en los principios de la igualdad y la ampliación permanente de derechos. Lo atacan porque Videla murió en la cárcel y porque propone, con más costos que beneficios, que la Justicia puede y debe ser reformada.

Sin desconocer problemas, sin admitir que se violente la dignidad de la función pública, sin aceptar que bajo una cita de Jefferson o Madison se nos diga que no entendemos de los ordenamientos judiciales, que son producto de sociedades historizadas y no paralizadas por sus clases poseedoras, sin argumentar con excepciones vigentes sólo hacia nosotros mismos, todo ello nos habilita a señalar a una prensa que primero le dice golpista al Gobierno –como se lo dijeron a Yrigoyen para después poder golpear ellos– sin pretender que las instituciones están al margen de una vivaz discusión cotidiana, hacemos un llamado a quienes siguen formando en la consideración hacia este gobierno a pesar de su dificultades –que llamamos a discutir– y de las izquierdas democráticas a quienes llamamos a deliberar sobre la base de un mismo sentido común: el sentido de lo justo, madre de las inclinaciones históricas hacia un latinoamericanismo emancipado, una economía y tecnología sin agresiones al medio ambiente y un sector progresista de la sociedad que sin dejar de criticar a la corrupción, como nosotros mismos lo hacemos, no haga de este concepto una sentencia visual de jueces autoerigidos, de togados mediáticos donde en vez de pruebas necesarias, que lleven a prisión a quienes sea necesario, como en el caso Pedraza, sirvan apenas para la tarea menor de ser coadyuvantes de una comedia desestabilizadora que nos introduzca a una nueva tragedia argentina.

Pero también destacamos, con el mismo énfasis, que en la semana en que se cumplen los primeros diez años de este gobierno somos testigos de un país que ha logrado reencontrarse con aquello que se había extraviado, primero en la noche oscura de la dictadura y después bajo la impunidad neoliberal, y que fue recuperado por la voluntad de ese mismo hombre al que hoy buscan caricaturizar como si fuera el arquetipo del avaro y custodio de bóvedas donde se guardarían riquezas fabulosas. Nos referimos a un país que vuelve a colocar en el centro de sus disputas y debates las cuestiones fundamentales de la igualdad y de lo justo. Una década en la que la reconstrucción de la política se transformó en una de las claves decisivas para volver a soñar con un país más justo, libre y emancipado. Eso es lo que está en juego en esta hora preñada de dificultades y desafíos. Ellos, los inspiradores de tanto odio, lo saben: es ahora cuando tienen que golpear despiadadamente. Nada más horroroso, para su visión alucinada, que la consolidación y la ampliación de un proyecto que vuelve a hacer visibles a los invisibles de la historia. Eso, nada más ni nada menos, es lo que ha estado y sigue estando en disputa en esta década atravesada por cambios notables y nuevos desafíos que, eso pensamos, deberían, siempre, ir en busca de una sociedad más justa.

viernes, 17 de mayo de 2013

Autoridad Moral

La captura de pantalla es del sitio web clarinesco.
Sólo le agregue las flechas y leyendas en los recuadros de color.

Es tragicomico ver, leer y escuchar como nos quieren convencer del supuesto peligro de legislar sobre las empresas de medios de comunicación, y más trágico es que soliciten la intervención de potencias extranjeras  que no tienen ninguna autoridad moral para dar consejos de ningún tipo.



lunes, 8 de abril de 2013

El pollo de Del Sel - Lectura entre líneas


La gente de Política Plus  le ha realizado un reportaje al periodista Miguel Tessandori, con motivo de la convocatoria que le hiciera Miguel Del Sel para que participe en la próximas elecciones como candidato del PRO santafesino.


PPlus: Y en caso de que esta propuesta se concrete, ¿por qué te tentaría o te verías identificado con el PRO y no con otro partido político?

MT: Yo no me identifico con ningún partido político. En este caso me identifico con el PRO porque quien me invita es Miguel Del Sel, nada más.

Como todo allegado desde el ámbito del espectáculo y  apolítico dice que no se identifica con ningún partido, y que sin embargo ¿se identifica con el PRO por amiguismo?¿el PRO no es un partido político?
Contradicciones que le dicen.


MT: Si me permitís mi opinión y me preguntás por qué el PRO, creo que cada partido político tiene su fundamento y Miguel Del Sel está integrando ese partido. Y allí hay gente importante y no confrontativa,..

Cuestión de elegir palabras 1: Confrontativa 
Así que el fundamento para ser del PRO es ¿Miguel Del Sel? 

¿Es una virtud no ser confrontativos en política?
¿Acaso la política o mejor dicho los partidos políticos no tienen que hacerse del poder para desarrollar su programa o plataforma política?
¿O lo que propone es que se debe ser sumiso? ¿Sumiso como De La Rúa?


MT:...Estamos en un momento muy duro, en todo aspecto, creando odios y resquemores. El negro y el blanco, sin solución de continuidad, que no nos conduce a absolutamente nada. Tenemos que probar mucho más que esta democracia que tiene 32 años, y que no solamente está incipiente sino que tiene muchos agujeros por cubrir. Pero yo no tengo una definición política, nunca la tuve ni soy de los que dicen soy peronista o soy radical. Soy un tipo que procura que la gente viva mejor y nada más, que estemos bien. El político es un ave muy difícil de calificar. Necesario, pero a veces imposible de calificar. Así que por ahora, es solamente la identidad de una persona.

Resumen: “Soy un buen tipo  y no contaminado por la política”.


PPlus: Si fueses un candidato político hoy en día, ¿qué tendrías para proponerle a la sociedad y qué medidas llevarías a cabo?

MT: ¡Todos tenemos la visión de que necesitaríamos 48 horas para ser Presidente de la Nación, o tener la posibilidad de determinar acciones! (risas). Pero creo que el concepto es mucho más abarcativo, porque se ha destruido primero la educación y después la cultura del trabajo y hay generaciones sometidas a profundos dilemas y problemas. A partir de ahí, y abonado por los gobiernos de turno, se fue transformando esta mecánica que habíamos construido, de trabajar, educarse y disciplinarse. Y el país ha sufrido enormemente las consecuencias, porque eso es caldo de cultivo para el ingreso de la droga, de la prostitución y de la corrupción, abalado por los gobiernos. Para cambiar esto, yo destinaría gran parte del presupuesto a la educación.

 Estaría bueno que hubiese aclarado quiénes y cuando destruyeron la educación y cuando la “cultura del Trabajo”. Intuyo que su respuesta a la última pregunta tendrá como eje central a los planes sociales, olvidándose que esos planes son necesarios por el aniquilamiento de la industria nacional y por la burguesía fallida argentina que sólo piensa en la renta.
TRABAJAR, EDUCARSE Y DISCIPLINARSE” que buen slogan de campaña, sobre todo eso de disciplinarse.
Hasta ahora, respuestas al nivel de Doña Tota Indignada, nada por rescatar, excepto lo del presupuesto a educación. Aclarando que el PRO ha hecho todo lo contrario en el distrito que gobierna.


MT:… Nuestro país, en consideración general, estuvo en mejor nivel y con menos problemas internos cuando el presupuesto de educación fue mayor.

El mayor presupuesto para Educación fue de 1963 a 1966 en la presidencia de Arturo Illia. Hoy es de más del 6% del PBI.
Y eso de que no había problemas internos, al menos a mí no me queda claro, visto el golpe de estado que sufrió. 
Claro, entiendo hacia donde apunta, perdón “apunta” no porque es muy confrontativa, mejor digamos “se dirige” la respuesta, pero comete la estupidez del que “todo pasado fue mejor”, pero, y como es habitual en este tipo de comentario de baldeando la vereda, nunca dicen cuando exactamente estábamos mejor. Ese pequeño gran detalle que queda a criterio del lector.


MT: …Y ahí está ligado el problema, para no entrar en detalles ni tirarse la pelota entre los gobiernos socialistas y populistas.

¿socialistas y populistas? ¿Y los radicales en que categoría entran?
Sí, ya sé, nada que ver mi comentario, pero me quedo picando la duda.


MT: Porque también está la presión política para dar a conocer cosas que pasan en ciertos lugares y que también ocurren en otros, pero no son conocidos o no se vuelvan a la opinión pública. En realidad somos todos iguales, en vez de haber aprendido hemos minimizado a nuestro país y lo hemos convertido en algo que tiene que durar, y no transformarse.

¿Qué?,¿cómo?, eso es todo?, y las propuestas para fomentar la industria, propuestas en salud, propuestas en política económica?¿relaciones internacionales?. Digo, recordemos la pregunta: Si fueses un candidato político hoy en día, ¿qué tendrías para proponerle a la sociedad y qué medidas llevarías a cabo?


PPlus: -Con todos los representantes políticos a uno puede pasarle que encuentra aspectos positivos y negativos en las gestiones... A nivel nacional, ¿qué críticas podrías realizarle al gobierno de la presidenta Cristina Fernández?

MT: En un momento determinado, la irrupción de los Kirchner fue positiva, desde el aspecto de limpiar ciertas costumbres que teníamos en materia de desprotección de la industria nacional, de disciplinar a la gente para que pensara nacionalmente.

Cuestión de elegir palabras 2:  IRRUPCIÓN
Cuestión de elegir palabras 3: DISCIPLINAR.
Con esta última palabrita y en el contexto, ¿estará diciendo que está de acuerdo con las medidas tendientes a disminuir el uso de monedas extranjeras? 
Mmm, entonces debería pensar al menos un par de años/milenios eso de ser candidato del PRO.


MT: … Pero después se fue abonando permanentemente a los actos de corrupción, defendiendo procesos de Ministerios y personas representativas que no podían ser defendidas.

¿Por ejemplo? ¿Situaciones, algo concreto? 
Los casos de corrupción están en la justicia. Porque si no nos quedamos en el comentario generalizado de son todos corruptos.

MT:… Y me parece que este discurso del famoso modelo, del relato, de la antinomia y del enfrentamiento...

Ah, claro el posible pollo de la TOTA abona a la teoría no confrontativa, de solicitarle permiso , por ejemplo a Repsol para nacional YPF, o de besarle el anillo al FMI para evitar que nos sigan estafando con sus recetas podridas. Es que como esa gente es tan buena y considerada es una barbaridá (así con acento y sin d) confrontarlos.


MT:  Y hasta el revelado público de ciertos aspectos de la vida argentina, han sido el detonante de este odio.

¿El revelado público ?¿Se estará refiriendo a la participación de algunos en la dictadura genocida?¿A qué se refiere?


MT: Me hace acordar mucho a la época en que el primer peronismo defendía a ultranza su doctrina en contra de los otros y los aplastaba. Se estaba con o en contra. Y a mí esto nunca me gustó, porque nos acerca a regímenes dictatoriales, porque nos obliga a tratar de pensar como piensan los otros, cuando nos enfrentan y nos prometen solamente peleas.

Amor y paz, no confrontar,  y sobre todo ser disciplinados!!!


MT: El modelo político en sí, en cualquier país, es bastante objetable. Pero lo que nos falta sobre todo a nosotros es el ejercicio del Estado. El Estado está ausente de la mano de la gente, como pudimos verlo, por ejemplo, en casos patéticos como fue el accidente de trenes, donde se vivió la falta de presencia y de consuelo. Generalmente en estos hechos, que no son simples de resolver, no está todo directamente relacionado con y hacia el Estado. Pero si el Estado demuestra conciencia, presencia, le habla a la gente y le brinda ánimo, se puede hacer la política de los gobernados.

Este.., ¿el PRO pidiendo más ESTADO?
Miguel, por favor, deja de leer Clarín y ponete a hacer un poco de periodismo serio. Un buen tema para comenzar sería “Ideología del PRO bolilla 1”.
Che, yo también vivo en Rosario, y la verdad que no considero que la ciudad sea sinónimo de Termo.


MT: Pero Cristina Fernández, que fue una legisladora importante y estuvo al lado de su marido, cometió el error y el pecado de la soberbia, del ejercicio del poder desmedido y me parece que hoy está desbordada.

Cuestión de elegir palabras 4: Soberbia.
Cuestión de elegir palabras 5: ¿Poder Desmedido? Para nada, muy medido (54%)
Cuestión de elegir palabras 6: Desbordada - ¿Será que no sabe bordar?


MT: Un país no se maneja por cadena nacional ni por twitter, se maneja con mucha presencia. Porque así se maneja el poder, escuchando y defendiendo a la gente y eso nos está faltando, es un argumento que los K han dejado en el camino y que podría desembocar en consecuencias políticas nefastas.
Porque además, estamos atados de algunas variables económicas que apenas se desborden un poquito, pueden provocar un cimbronazo muy grande y difícil de resolver.

El tipo tiene la posta, "así se maneja el poder".
"que los k", cómo que suena a dividir a la sociedad ¿no?

Cuestión de elegir palabras 7: Nefastas – Apocalíptico resultó el pollo de la TOTA

¿Atados a que variables? ¿Al dólar blue? ¿Al riesgo País?¿a la inflación?, pobre, muy pobre todo hasta acá. 

MT: También hace falta que los otros representantes políticos se pongan en la cabeza que hay que luchar políticamente, y no aceptar o durar, haciendo que la democracia sea solamente un gobierno de vivos para perdurar en los años, dejando hacer siempre al mismo poder.

Epa, y ¿qué pasó con eso de no ser Confrontativos?


MT: Sino de esta manera, cometemos un claro desequilibrio que nos puede llevar a imprevisibles consecuencias. Que ya pasó en la historia una vez, los tiempos no se repiten pero sí se repiten los hechos.

¿Cuándo pasó? Estoy algo confundido,  o desconoce la Historia Argentina, o está hablando de un hecho único hasta ahora como fue el 17 de octubre de 1945.
Digo, porque si habla del golpe de estado del 24 de marzo de 1976, la verdad que fue el peor y más desgarrador para el pueblo argentino, pero no fue el único.
Tal vez habla del 2001, pero tampoco, ya que vivimos crisis similares, digo, los pobres, aunque la diferencia en 2001 fue que también afecto a los no tan pobres.
Viste eso pasa cuando se responden generalidades, lo cual está bien para alguien que no está pensando en ser candidato de algún partido político. 



MT:  Y esto después nos va a impedir que hagamos el necesario mea culpa y salgamos adelante. Pero volviendo a lo que te decía antes, si nosotros no volcamos el cambio en la educación y en la disciplina del trabajo, estamos complicados y el país se va deteriorando gravemente.


Sí definitivamente el slogan de campaña será:
“EDUCARSE  para DISCIPLINARSE”
Votá por el PELADO TESSA

Fuente: http://www.politicaplus.com/?q=read&id=449


Bueno, creí interesante este articulo, a pesar de que tal vez Miguel Tessandori nunca se postule a nada, para tratar de entender cuáles son los motivos y/o aptitudes que han llevado a su convocatoria (más allá del convocante que, realmente, da verguenza ajena), y sobre todo cual es el perfil de político que pretende imponer el PRO.
Digo, ya sabemos que son apolíticos, que odian la política, que no les agrada la intervención del estado en ciertas cuestiones, pero que critican hasta el hartazgo cuando se tocan sus intereses, que se esconde detrás de un republicanismo patético, etc. Pero, la manera burda con la cual se maneja Del Sel (el casi gobernador de Santa Fe, ojo) da la posibilidad de que ellos mismos, en sus palabras dejen entrever cuales serían sus prioridades.

Sobre Miguel Tessandori, decir que es un muy conocido periodista deportivo de Rosario (Canal 3), o al menos siempre lo conocí en esa función, y punto. Nada más, no recuerdo compromisos asumidos durante su extensa trayectoria, con causas públicas, eso no quiere decir nada, sólo que yo no tengo conocimiento de que se haya jugado alguna vez por la gente.
Como sostuve al momento de conocer la postulación de Del Sel, que se postule si quiere, está en su derecho, luego el pueblo decidirá.

jueves, 7 de marzo de 2013

El legado de Chávez



Según la CNN el LEGADO es la DIVISIÓN, o al menos eso entendí de tanto escucharlo de boca de sus periodistas  y/o analistas políticos cada cinco minutos.

La división en la que Chávez sumió al pueblo venezolano, sí señor, ése fue su legado.

Están quienes lo aman, y quienes lo odian, dicen.
Ha enfrentado a hermano contra hermano, a desunido a la familia, alegan.
Ese ha sido el legado, que según ellos ha dejado Chávez.

Y yo me pregunto ¿fue él quién generó esa división o simplemente la hizo visible?
Más importante aún: ¿quienes están de un lado de la linea divisoria y quienes del otro lado?

¿Quiénes son los que lo respetan, lo siguen, y lo amarán por siempre?

¿Quienes son los que odian?

No, estas preguntas no se harán en CNN ni en ningún medio de comunicación que responda a ciertos intereses. Y mucho menos se permitirá una respuesta sincera, porque la respuesta los comprometerá indefectiblemente.

Pero entonces, me dirán, existe la división, la división es real!!.

Sí, si existe.

La división entre los que más tienen y los que no tienen nada, la división entre los que no comprenden el concepto de esperanza porque no la necesitan,  y quienes a fuerza de miserias la habían dejado escondida en un rinconcito para que no se la robaran.

Sí, la sociedad está dividida, pero no es sólo la venezolana, es también la argentina, la chilena, la española, la norteamericana. Toda la sociedad humana está dividida.


El legado de Chávez no fue la división, sino, se me ocurre, las acciones tendientes a que esa división concluyera.
Chávez le dio entidad, le dio voz a quienes estaban del lado oculto de esa división.


¿Quienes son los que odian?

¿Quienes son los que festejan el cáncer?


El problema de los que odian, no es la división, nunca lo fue, ellos lo que no perdonan es que a los del otro lado le hayan mostrado esa linea imaginaria y sobre todo el cómo borrarla.

Odian porque temen.

Los que temen perder privilegios son consumidos por el odio.
Y eso los hace odiar más porque deben salir a la luz y mostrarse tal como son, temerosos miserables.

Chávez fue un líder  y como todos los lideres, no le tembló el pulso para visibilizar las diferencias, cobardemente escondidas por gerentes políticos de las clases dominantes.
Eso hacen los lideres, ya sea para correr esa linea imaginaria hacia uno lado o hacia el otro.


No CNN, el legado de Chávez no es la división del Pueblo venezolano.

El legado será el que el pueblo venezolano decida, sólo ellos lo dirán.

Pero que a partir de Chávez tendrán una perspectiva más amplia, eso sin dudarlo.

lunes, 11 de febrero de 2013

Santa Fe Gestión de Seguridad: OFF

Estractos de la nota que LaPoliticaOnline le realizó a Enrique Font

Enrique Font es investigador y profesor de criminología. Hace cuatro meses fue seleccionado en Ginebra, Suiza, para integrar el Subcomité de Prevención de la Tortura de la ONU. Su vasta experiencia no se reduce al ámbito académico, también coordinó proyectos de cooperación internacional en la Secretaría de Seguridad Interior de la Nación y fue secretario de Seguridad Comunitaria durante la breve gestión de Daniel Cuenca a cargo del Ministerio de Seguridad durante el gobierno de Hermes Binner. Renunció en noviembre del 2011 para concursar por el cargo de Auditor del Sistema de Fiscalías de la provincia.


¿Porqué ha aumentado los crímenes relacionados al narcotráfico en Santa Fe?
Primero, no hay que vincular directamente a los crímenes con el narcotráfico. Se puede tener narcotráfico sin homicidios. En Rosario y Santa Fe, los homicidios son, principalmente, de hombres jóvenes de sectores populares. Lo que sucede es que en situaciones de exclusión social muy intensas, la pertenencia a una banda da identidad, reconocimiento y respeto. Sumado a que la economía de la venta de drogas genera mucho dinero con el cual también se consigue prestigio. Por eso, donde hay que poner la lupa son en las condiciones sociales en las que suceden los homicidios. Si no, se le echa la culpa a una entelequia llamada narcotráfico y se le quita responsabilidad a la sociedad donde se han producido cambios. Es notorio el aumento de la demanda de drogas. El consumo se ha extendido, tolerado y aceptado y este fenómeno no afecta solamente a los sectores populares sino que consumen las clases media y alta; por eso es un gran negocio, sobre todo la cocaína. 
...

¿Qué lugar ocupa la policía en este proceso?

La corrupción policial cumple un papel fundamental. La policía tiene dos formas de apropiación ilegal de dinero: el primero, es el presupuesto propio que al estar distribuido en 19 unidades regionales (uno por departamento) se hace muy difícil de controlar. Por el otro lado, la caja del delito. La policía está totalmente vinculada a la regulación de las economías delictivas. Encima, es una fuerza que no está bien capacitada, es pésima investigando, es bruta y no sabe lo que hay que hacer. Por eso, el cambio del jefe de policías, solamente, no alcanza. También tenemos uno de los poderes judiciales más corruptos, más inútiles e ineficientes. Es el poder judicial que intervino Onganía en el ’68, luego lo tomó el Opus Dei y en el ‘83 se lo repartieron entre peronistas y radicales y en dos estudios jurídicos se nombraron los jueces. Hay fiscales de esa época, que aún hoy no han dejado de serlo porque no pueden someterse a un concurso porque pierden. Ese Poder Judicial tiene que ver con los homicidios porque no sabe los pasos elementales para la investigación criminal y cualquier pez un poco grande, pasa la red porque sus investigaciones son patéticas. Hay muy pocos jueces y fiscales que investigan bien en Santa Fe. La mayoría de los crímenes que se cometen, son realizados por personas que tendrían que estar presas.


Entre provincia y nación se responsabilizan mutuamente por el crecimiento del narcotráfico. Provincia dice que es jurisdicción federal ¿Cómo operan las jurisdicciones en concreto?

Lo que ha ocurrido es que desde los años ‘90 en adelante, las fuerzas federales se fueron desentendiendo. Es de competencia federal pero en relación a los tribunales. Progresivamente se fueron haciendo cargo las fuerzas provinciales. Al punto que hay provincias que hicieron la catastrófica experiencia de provincializar la competencia. En la práctica, lo más común es que la territorialización sea de competencia provincial y las fuerzas federales controlen fronteras o ciudad de Buenos Aires. Santa Fe quiere que intervenga nación en materia de narcotráfico pero esto atraviesa corrupción y participación policial y donde se cruzan otros delitos que no son competencia federal. Si acá viene la PSA y Gendarmería a investigar el narcotráfico tendríamos un policía preso todas las semanas. No soporta políticamente una intervención federal. Ninguna provincia lo soportaría. 

...


La gestión

¿Cómo fue su paso por la gestión en Seguridad Ciudadana? ¿Cuáles fueron las limitaciones?


Yo estaba trabajando en la Secretaría de Seguridad Interior de la Nación cuando en agosto del 2009 (Daniel) Cuenca me convoca. Estaba armando su equipo como Ministro de Seguridad (durante el gobierno de Binner). Hizo varios avances, convocó a personal idóneo que había trabajado con Arslanián, creó la Secretaría de Control de Seguridad y a mí me ofreció la Secretaría de Seguridad Comunitaria. A los seis meses, Cuenca renunció por un problema de salud. El gobierno, en vez de apostar a lo que se había hecho, nombra a un ministro sin antecedentes en gestión, sin experiencia en seguridad ni en política (Álvaro Gaviola). Con Gaviola no había garantías para que se realice una reforma policial, o que haya control de la policial. Les advertí a los ministros y al mismo gobernador que iban a tener problemas por los homicidios, que iba a haber crisis de gobernabilidad por corrupción y violencia policial. Era el proceso que se veía venir. A todos se los dije. Luego vino Corti pero no tenía equipo y le dio órdenes a la policía. Se erosionó solo en tres meses porque echo a 20 comisarios pero tampoco eso es conducción de la fuerza policial.

Leer nota completa

miércoles, 6 de febrero de 2013

Narcosocialismo en la mira de la Justicia

El periodista Carlos del Frade, candidato a diputado por Proyecto Sur, dijo en Radio Nacional:

"Hoy se está tramitando una causa federal, y esto es primicia para ustedes, creo que a nivel nacional,  hay una causa que se está tramitando en la justicia federal de Buenos Aires, en donde se ratifica y se profundiza todo esto que yo te digo, sobre la causa judicial del triple crimen de villa moreno la complicidad de la 19 y va a caer un ex funcionario del socialismo seriamente vinculado a la cuestión del dinero del narcotrafico que habia sido chofer de binner, luego fue el titular de la GUM, fue subsecretario de seguridad, y que extrañamanente cuando paso lo de Tognoli lo pasaron a retiro, y vaya a saber donde está, que es el Señor Escajadillo ..."


Escucha con atención:
http://dl.dropbox.com/u/23754154/Del%20Frade.mp3

Ref.:
GUM : Guardia Urbana Municipal

Fuente: Audio Radio Nacional - Rosario

jueves, 31 de enero de 2013

Un poco de Humor Republicano

Una vez más nuestro humorista autóctono ha trascendido a la fama



Y por ello debe pagar el precio de disculparse ante el mundo:

Eso es ser REPUBLICANO, preocuparse por la investidura y no por las personas.
Aunque ese potencial ("si ofendí") deja en claro que no estaba muy convencido de tener que pedir disculpas

"Escuchaste puta, a pesar no sentarme a tomar un café con vos, o a patearte un plato de sopa por la cara, estoy más que dispuesto a dialogar"

Lo grave no es que putee y que piense como piensa, lo grave es que en un acto de cobardía y moralina barata luego se desdice y no tiene lo huevos para seguir sosteniendo su pensamiento machista retrogrado y vulgar.

viernes, 11 de enero de 2013

El gobernador NS/NC


Comunicado de los compañeros del Movimiento Evita debido al ataque a tiros sufrido por militantes de su organización en un barrio de la ciudad:




Rosario es tierra de nadie
El Movimiento Evita de la provincia de Santa Fe se pronunció en torno del gravísimo ataque a tres jóvenes militantes de esa fuerza política, baleados este jueves en barrio Nuevo Alberdi por quienes oficiaban como custodios de un búnker de venta de droga, que en la jerga del narcotráfico se conoce como “soldaditos”.
A continuación, el texto completo del comunicado del Movimiento Evita de la provincia de Santa Fe:
Rosario es tierra de nadie. A pocos días de cumplirse un año del brutal triple crimen en barrio Moreno -aún impune-, y luego de las permanentes denuncias que venimos realizando acerca de la presencia de sectores del narcotráfico en las zonas más vulnerables de la ciudad, abandonadas por el municipio, adonde al narcotráfico le molesta nuestro trabajo social, podemos decirlo sin riesgo de exagerar: Rosario es tierra de nadie.
Ayer tres jóvenes compañeros de la JP Evita que estaban desarrollando su trabajo en la zona de Luzuriaga y Somoza, en Nuevo Alberdi, fueron baleados por “soldaditos” claramente vinculados con el narcotráfico. Uno de ellos, Gastón Arregui, permanece en gravísimo estado.
Ayer, durante toda la jornada, los medios difundieron la carta que el diputado del Movimiento Evita Eduardo Toniolli le remitió al senador por el departamento General Obligado, Orfilio Marcón, quien había justificado a policías que están procesados por cometer apremios contra detenidos en la localidad de Florencia. El senador radical, integrante del Frente Progresista, Cívico y Social, fue refutado por el vicegobernador Jorge Henn, de su mismo partido, pero cabe como nunca la definición de estos contrapuntos como un verdadero discurso esquizofrénico, para nada progresista, de modo alguno cívico y profundamente antisocial.
El ex gobernador Hermes Binner es responsable. El gobernador Antonio Bonfatti es responsable. La intendenta Mónica Fein es responsable. Los dos últimos salieron a caminar hoy, de recorrida por las obras de lo que denominan Ciudad Joven. “No tengo por qué conocer lo que está ocurriendo en particular en cada uno de los barrios de Rosario”, sentenció Bonfatti. Nosotros le decimos que sí, que un gobernante que gobierna para todos no sólo sabe lo que es la Ciudad Joven, debe estar en conocimiento y prestar atención a la Tierra de Nadie, también poblada por jóvenes, pero que no reciben la bendición del Estado socialista.
La intendenta Fein intentó atajarse y expresó: “En el barrio Ludueña tenemos tres centros de trabajo de promoción social y trabajamos con todos los centros comunitarios”, y acto seguido tuvo el desparpajo de decir que “el municipio de Rosario tiene 11.500 trabajadores y 8 mil están en el área social, trabajando en la inclusión, en la salud, en la cultura, promoción social y la vivienda”. La presencia permanente del Movimiento Evita en los barrios de Rosario desmiente ese despliegue de políticas activas que promociona la intendenta Fein, y ni ella ni Bonfatti pueden desconocer las sistemáticas denuncias que les venimos haciendo respecto del fenómeno de las bandas narco en sectores de la ciudad en los que el Estado no tiene presencia.
Sabemos que Fein está muy ocupada en hacer lobby para lograr que en 2014 el Rally Dakar salga de Rosario, y entendemos que el ex gobernador Binner quiera que la Argentina se parezca a Ghana. Desde el Movimiento Evita les advertimos hace ya mucho tiempo que nuestros legisladores y militantes no aceptarán de modo alguno la política de criminalización de la protesta social, y que la respuesta a fenómenos como la penetración del narcotráfico en las principales ciudades de la provincia sólo se puede combatir con políticas activas inclusivas, con un Estado alerta y presente en esos territorios.
Esa ausencia del Estado no se remite sólo a lo social, también se articula con la connivencia de parte de la fuerza de seguridad provincial. Cómo se explica, si no, que cada día se produzcan hechos de violencia producto del desembarco del narcotráfico en las barriadas rosarinas más vulnerables, sin la mínima participación de la policía, que debería proteger a los vecinos y a quienes desarrollan el trabajo social que municipio y provincia han abandonado por completo. El de barrio Moreno, hace un año, y el de ayer, son los más graves de esos episodios, pero no los únicos, ni están desvinculados entre sí.
Apenas las cámaras y los micrófonos dejaron de apuntar al escándalo de la narcopolicía, con jefes nombrados por los dos gobernadores socialistas investigados por su relación presunta con narcotraficantes, ya no se derrumban búnkers con topadoras, y esos que tiraron abajo ya abrieron otras “sucursales” en la misma cuadra o no muy lejos de allí. Si Bonfatti no lo sabe, porque dice no tener por qué estar al tanto de todo lo que pasa en los barrios de Rosario, el Movimiento Evita se lo muestra. Lo único que pedimos es que tanta falta de información por parte del gobernador no siga causando víctimas ni derramamientos de sangre como hasta ahora.
Firman:
Diputado provincial Gerardo Rico, integrante de la Mesa Nacional de Conducción del Movimiento Evita
Eduardo Toniolli, diputado provincial y secretario general de la Departamental Rosario del PJ
José Luis Berra, secretario general del Movimiento Evita de la provincia de Santa Fe
Fernado Chino Rosúa, secretario político del Movimiento Evita de la provincia de Santa Fe


FUENTE: http://www.movimiento-evita.org.ar/?p=11687